Hace unos días les informábamos la historia de don Alejandro Guzmán, hombre de 70 años con dependencia severa, contexto que complicaba a su pareja y a la cuidadora poder llevarlo a vacunarse contra el COVID-19, por lo que constantemente pedían en el consultorio del sector poder ir hasta su casa, sin embargo pese, a no tener una respuesta satisfactoria, por fin pudo inocularse con la primera dosis