“Ese noble espíritu de unidad al enfrentar las dificultades y desafíos es el que nos ha permitido salir airosos de las más duras pruebas que la historia nos ha puesto. Ese carácter guerrero es el que nos caracteriza a los chilenos, que no nos amilana ante la adversidad, por el contrario, nos agranda ante los desafíos”, señaló el Almirante Leiva en su discurso.
Un 21 de mayo diferente se vivió este jueves en Valparaíso. Los tradicionales festejos en la plaza Sotomayor, con fuerzas de presentación y cientos de ciudadanos en las calles, fueron reemplazados por conmemoraciones, recuerdos y anécdotas transmitidas mediante streaming en diferentes plataformas virtuales de la Armada, lo que permitió que miles de compatriotas, tanto en Chile como en el extranjero, pudieran acceder a las tradiciones más antiguas de la Marina desde otro formato.
El día comenzó con la transmisión de la ceremonia interna del 21 de mayo desde el Buque Escuela “Esmeralda”, para luego, de la mano del profesor Marco Fernández, del Museo Marítimo Nacional, repasar la historia de la gesta de Iquique y sus principales hitos.
La mañana continuó con una reflexión por parte del capellán evangélico de la Armada seguido con la tradicional eucaristía en honor a los Héroes de Iquique, esta vez no desde el Monumento, sino desde la iglesia naval Nuestra Señora del Carmen de Las Salinas, la que fue presidida por el Obispo Castrense, Monseñor Santiago Silva, y concelebrada por los Capellanes Navales.
Tras un recorrido por la Escuela Naval “Arturo Prat”, donde fueron mostrados diversos objetos históricos, entre ellos la espada que perteneció a Prat y que se mantiene en el museo ubicado dentro de la Escuela, la mañana terminó con el discurso del Comandante en Jefe de la Armada, Almirante Julio Leiva.
“Éste es un 21 de mayo distinto a los demás. Es uno en que no tendremos ceremonias ni desfiles masivos, no habrá discursos en los colegios, las calles no se llenarán de gente ni de banderas multicolores. Este 21 de mayo será un día de reflexión, un día para pensar en la unidad de los chilenos, en cómo ganar entre todos este combate desigual. Un día para hacer que la arenga de Arturo Prat vuelva a sonar en nuestros oídos y en nuestros corazones. Un día para que enseñemos esas palabras a nuestros hijos y nietos”, señaló el Almirante Leiva.
“El ejemplo de Prat y su dotación le dio un sentido diferente al privilegio de ser chileno. Convergieron en las cubiertas de ese glorioso buque, personas de todos los rincones de la Patria, sin distinción de ningún tipo. Hyatt nació en Estados Unidos, Micalvi en Grecia, pero lucharon y murieron hermanados junto a santiaguinos y porteños, penquistas y coquimbanos, chilotes, magallánicos, copiapinos y temucanos. Todos ellos, liderados por un solo Comandante, lucharon unidos bajo una sola bandera, bajo un mismo ideal, sirviendo a una misma Patria”, continuó.
“¡Nuestra bandera no se arría! Los chilenos no nos rendimos. Los chilenos nos levantamos de las pruebas más duras y volvemos a luchar. Eso es lo que hacemos hoy, pues el ejemplo de esa dotación inmortal nos obliga a perseverar, y luchar unidos como nación hasta vencer este flagelo que ataca a nuestro país y el mundo”, finalizó.
Monumento a los Héroes
La única actividad realizada en forma presencial fue la ceremonia que se realiza en el Monumento a los Héroes de Iquique y donde, a las 12.10, se recuerda con toques de pito y cornetas, junto a salvas de 21 cañonazos y los toques de sirenas de buques, de las Compañías de Bomberos y campanas de iglesias de todo Valparaíso, el momento exacto en que se hundió la “Esmeralda” en la rada de Iquique aquel 21 de mayo de 1879.
Con un número reducido de asistentes, dada la contingencia, la ceremonia en el Monumento fue presidida por el Ministro de Defensa Nacional, Alberto Espina, acompañado por el Comandante en Jefe de la Armada, Almirante Julio Leiva, junto a autoridades navales. Además, estuvieron presentes en el Monumento en representación de toda la Gente de Mar, el Condestable Mayor de la Armada, SubOficial Mayor Carlos Retamal, y por parte de los Oficiales, el Capitán de Navío Flavio Montaña.
Para finalizar la distinta pero emotiva ceremonia, a través de cadena nacional, el Presidente de la República, Sebastián Piñera Echenique, señaló que “esta es la oportunidad de mostrar nuestro heroísmo y nuestro amor por Chile de forma sublime como lo hizo Arturo Prat en Iquique aquel 21 de mayo, donde entregó su vida por la patria. Todos tenemos esa oportunidad de mostrar grandeza y amor por Chile, como es este símbolo inmortal de la Armada y de nuestro país”.
Además agregó que “hoy cuando la patria y el mundo entero viven tiempos duros y difíciles, quisiera recordar al Presidente Aníbal Pinto, dando un mensaje de fe y esperanza, pedir la unidad y colaboración de todos los chilenos, para derrotar esta pandemia y recuperar nuestras vidas. Algunos desde casa y otros yendo a trabajar, en servicios de salud o produciendo bienes y servicios esenciales para las familias. Otros, como los hombres y mujeres de la Armada de Chile, defendiendo nuestra soberanía, patrullando nuestros mares, aportando su Personal y logística a la emergencia sanitaria”.
Con las palabras del Presidente de la República y una Plaza Sotomayor completa por la emoción de esta conmemoración distinta, culminó el homenaje a los 141 años del Combate Naval de Iquique y Punta Gruesa.